Hace un tiempo que escribí esta prosa -sin más- Una paz perturbada:
El odio reclutó inmediatamente la sonoridad del recuerdo, ése aquel que alguna vez entrañé tanto; ése aquel que una vez solicité y no oí respuesta alguna. Es curioso, pero ahora tiene aroma, aroma a paz y no sólo interna, pues quién dijo que la paz era sólo cuestión interna. Se manifiesta. Quizá ahora optimizar las cosas no sea buena salida, pero vaya que sí sirve; esta ha de ser la moraleja: "que mientras más lejano tengas un recuerdo, con más gusto lo recordarás."
Harry Cañari-Atoche
1 comentario:
Algunos recuerdos mejor bien lejos!
chau!
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